Mujeres de distintos barrios de Córdoba presentamos la ciudad que deseamos y necesitamos: una ciudad más habitable para todas nosotras, diversas pero iguales, que pondere formas de organización comunitarias y que derribe la cultura patriarcal imperante.
“Queremos cambiarlo todo” es la consigna de la Agenda por los Derechos de las Mujeres a la Ciudad, que condensa más de dos años de reflexión y trabajo colectivo. Fue presentada públicamente el sábado 27 de abril en el centro de la ciudad de Córdoba, en un festival cultural que nos hermanó bajo el sol entretejiendo música, juegos y propuestas feministas.
En el Festival por los Derechos de las Mujeres a la Ciudad presentamos los seis ejes que conforman la Agenda:
– Necesitamos construir ciudades más vivibles. Frente al modelo de ciudad neoliberal que se fortalece en Córdoba, reclamamos y queremos construir ciudades que garanticen nuestros derechos, sin violencias de género, pobreza ni discriminación.
– Queremos que nuestros barrios sean espacios más habitables. Habitamos los barrios cotidianamente y sabemos qué necesitamos para mejorarlos. Queremos barrios seguros, accesibles, amigables y bellos, y exigimos formar parte de las decisiones que se toman sobre ellos.
– Reconstruyendo vínculos barriales y comunitarios ¡Apostamos a la organización! Contrariamente a las políticas del miedo que nos imponen, proponemos acciones que promuevan el fortalecimiento de los lazos comunitarios y los vínculos barriales, la construcción de identidades colectivas, encuentros y construcción de comunidad.
– Basta de cultura patriarcal ¡Queremos todos nuestros derechos! El patriarcado permea todos los espacios que transitamos y habitamos, los territorios y las relaciones que establecemos. Exigimos, entre otras cosas, la implementación de la Ley de Educación Sexual Integral y la legalización de la Interrupción Voluntaria del Embarazo. Además, acciones territoriales y campañas de información eficientes para denunciar y recibir acompañamiento frente a situaciones de violencias.
– Economías pensadas para la sostenibilidad de la vida. Reclamamos economías que favorezcan el cuidado de los bienes comunes (la tierra, el agua, el aire) y privilegien el buen vivir. Queremos poder decidir de qué manera vivir nuestras vidas y tener más espacios de disfrute, sin que las necesidades de supervivencia nos marquen y nos condicionen.
– Somos diferentes, no queremos ser desiguales. Las jóvenes, las adultas mayores, las trabajadoras sexuales, las trans y travestis, las lesbianas, las personas en situación de discapacidad: a todas las ciudades nos imponen restricciones y condicionamientos. Apostamos a construir desde la diversidad, para que todas nuestras voces y experiencias sean tenidas en cuenta. No queremos que nuestras diferencias se establezcan como desigualdades, jerarquías ni privilegios entre nosotras.
Algunas de las compañeras que participaron en la construcción de esta agenda tomaron el micrófono para compartir los problemas que atraviesan en sus entornos urbanos. Sheila (de la Secretaría de Diversidad de la escuela Jerónimo Luis de Cabrera) se refirió al pésimo funcionamiento del transporte público en su barrio y cómo esto impacta en las vidas de las jóvenes, acrecentando la inseguridad y el aislamiento. Irma (de Vanguardia Femenina del Barrio Villa El Libertador) contó sobre la falta de cloacas en su barrio, un problema crítico que las vecinas reclaman hace años y que se traduce en insalubridad y enfermedades.
Entre juegos, mapeo y preguntas disparadoras para pensar la ciudad en la que vivimos, compartieron su arte Paola Bernal, Las Juanas, Mariana Orzaocoa, Lucía Zaghis, Lali Corzo, Brenda Mamani y Danza Munata: músicas y bailarinas que pusieron a todas en movimiento. Hacia el final, dimos por cerrado el encuentro en un gran abrazo colectivo.
Voces de Mujeres Diversas resuenan por toda Latinoamérica
Esta Agenda es la materialización del trabajo que venimos realizando desde fines de 2017 en el marco del Proyecto Voces de Mujeres Diversas por Ciudades Seguras, Inclusivas y Sostenibles, impulsado por CISCSA (Centro de Intercambio y Servicios para el Cono Sur Argentina) y por otras cinco organizaciones integrantes de la Red Mujer y Hábitat en diferentes ciudades de América Latina: la Asociación AVP de Colombia, la Fundación Guatemala, el Centro Flora Tristán de Perú, la Colectiva Feminista de El Salvador y la Corporación SUR de Chile.
A partir del trabajo realizado por todas estas organizaciones se desarrolló la Agenda de Mujeres por la Ciudad en América Latina que aporta un valioso enfoque regional sobre las necesidades, las demandas y el ejercicio de los Derechos a la Ciudad de Mujeres latinoamericanas.
En el caso de la ciudad de Córdoba, un grupo de compañeras de diferentes barrios populares se reunió para discutir y reflexionar sobre los derechos de las mujeres, lesbianas y trans a la ciudad, abordando las desigualdades y vulneraciones de derechos que vivimos las mujeres y las disidencias sexuales en los espacios urbanos. Juntas identificamos conflictos urbanos y sus impactos, revisamos los aportes de diversas disciplinas y miradas feministas para pensar las ciudades, discutimos sobre economía feminista, compartimos nuestras experiencias sobre la división sexual del trabajo y las diferentes violencias que vivimos. Recorrimos y mapeamos la ciudad, analizamos nuestros barrios, instituciones, los modos de organización. Y pensamos qué ciudades queremos y cómo hacer para construirlas.
Pensamos en esta agenda no sólo como herramienta para exigir nuestros derechos frente a actores particulares que deben garantizarlos, sino también como un documento -y sobre todo un proceso de construcción- que nos permite seguir desnaturalizando las desigualdades. Además de contener propuestas que -esperamos- se lleven a cabo, entendemos a esta agenda como una herramienta de sensibilización sobre el derecho a la ciudad. Buscando enriquecer los debates en torno a los derechos de las mujeres a la ciudad, sistematizaron sus demandas para la elaboración de propuestas que permitan incidir en la instalación de una mirada feminista sobre las ciudades y las experiencias de las mujeres. Este proceso y su materialización en la Agenda por los Derechos de las Mujeres a la Ciudad reflejan la madurez de los debates y la diversidad de voces al interior del movimiento de mujeres. También pone al descubierto el lugar protagónico que las mujeres de los sectores populares ocupan en las acciones de sostenibilidad de los barrios y las organizaciones comunitarias.
