Mujeres argentinas de norte a sur salieron a las calles a exigir al Estado el cese de la violencia de género en sus múltiples formas.
El pasado 8 de marzo se realizó, en alrededor de 60 países, el Paro Internacional de las Mujeres Trabajadoras, por tercera vez en el mundo y por cuarta vez en Argentina. Abrazando una agenda pública común en contra del patriarcado y unidas a las lesbianas, trans, travas e identidades no binarias, las calles se inundaron en violeta y verde, en abrazos, risas, lucha colectiva y organizada, y también lágrimas y dolor, porque la cifra de femicidios y crímenes de odio en lo que va de 2019 rompe los peores records.
Las feministas nos manifestamos por nuestra libertad en las calles, las plazas, las casas y las camas organizándonos en huelga feminista. No solo la Ciudad Autónoma de Buenos Aires se vio movilizada: en el interior del país también hubo miles de mujeres en todas las provincias visibilizando nuestra lucha.
La consigna en Argentina este año fue clara y contundente: “Frente al fascismo neoliberal y colonial que quiere redoblar sus violencias, nosotras y nosotres paramos. Paramos porque nos mueve el deseo de revolucionar nuestras vidas. Paramos porque sabemos que se va a caer. Al patriarcado lo estamos derrumbando desde abajo. También paramos contra la familia heteropatriarcal y el confinamiento doméstico, contra la explotación de nuestros territorios, contra el abuso sexual de los machos en posiciones de poder, contra los femicidios y travesticidios, contra la criminalización de lxs migrantes, contra la clandestinidad del aborto, contra la justicia patriarcal, contra el empobrecimiento y el endeudamiento sistemático, contra el asesinato de las lideresas territoriales, contra el racismo, contra los fanatismos religiosos y la moralización de nuestros deseos. Porque paramos contra las estructuras y los mandatos que hacen posible la valorización del capital (…) Con marchas en todo el país, el feminismo se manifestará contra el ajuste y la violencia machista, y ganará las calles para gritar basta de femicidios, lesbicidios y travesticidios”.
Las principales demandas
La Asamblea por el Paro Internacional de Mujeres Argentinas consensuó los reclamos principales del 8M 2019. Estos fueron:
– Separación definitiva de la iglesia y el Estado.
– Efectivización de la Ley de Educación Sexual Integral e inmediata promulgación la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo.
– Medidas efectivas para acabar con la violencia hacia las mujeres y hacia el colectivo LGTTBIQ+.
– Definitivo desmantelamiento de las redes de trata.
– Igual salario por igual trabajo.
– Visibilización, remuneración y reorganización del trabajo de cuidados y doméstico que pesa sobre las mujeres.
– Paridad de representación en todos los niveles del Estado.